OMS declara emergencia internacional por viruela del mono
Esta enfermedad produce fiebre, dolor muscular y de cabeza, entre otros síntomas.
Hace algunos días, la OMS declaró alerta mundial por viruela del mono, debido a que se detectaron aproximadamente 14 mil casos y casi 500 muertas por este virus. En total, 13 países de África mantienen casos activos actualmente.
Este virus es transmitido a través de animales salvajes como monos, ardillas y ratones. Sin embargo, también tiene una propagación relevante de persona a persona. Tradicionalmente, el virus de la viruela del mono se ha registrado mayoritariamente en África Central y Occidental, y tiene apariciones de forma esporádica.
El Dr. Carlos Pérez, infectólogo de Clínica Universidad de los Andes, explica que muchas veces el cuadro se caracteriza por “fiebre, dolor muscular, dolor de espalda, dolor de cabeza, escalofríos, inflamación de ganglios linfáticos y agotamiento”.
Sin embargo, tras un par de días de presentar fiebre, aparecen erupciones vesiculares sistémicas en la piel, gruesas y profundas, que evolucionan hasta la aparición de costras y afectan a las mucosas de la boca, genitales, la conjuntiva palpebral y la córnea. “También es importante tener en cuenta que esta infección puede manifestarse exclusivamente con lesiones en la piel y sin síntomas generales. Estas pueden comenzar en los genitales y luego extenderse a otras partes del cuerpo”, señala el especialista.
Asimismo, quienes tienen enfermedades crónicas o tienen un estado de inmunodeficiencia, presentan mayor riesgo de tener una complicación con este virus.
Con respecto a los tratamientos y prevención, existen antivirales (que aún no están disponibles para su uso en Chile), como los medicamentos cidofovir, tecovirimat, brincidofovir que pueden ser utilizados en aquellos casos más graves. Además, existe una vacuna efectiva para prevenir la infección, aunque por ahora no está indicada para la población general. Sin embargo, en la mayoría de los pacientes, basta con aislamiento y tratamiento para aliviar los síntomas.
